Un nuevo espacio terapéutico inauguró la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital de Arica, se trata del Huerto orgánico “Colibrí”, espacio comunitario creado por pacientes, amigos y familiares de Cuidados Paliativos.
El Huerto Colibrí nace como una iniciativa por recuperar un espacio y construir un huerto para otorgar tratamiento a los pacientes, familiares y amigos de la Unidad de Cuidados Paliativos, utilizando como método la neuroeducación a través de los sentidos, lo que consiste en estimular los sentidos a través del contacto con la naturaleza y sus recursos como la tierra, las plantas, el agua y el cuidado de un ecosistema, el que se construye de manera solidaria y colaborativa.
“Actualmente la función del huerto es que sea un espacio terapéutico para trabajar con los mismos pacientes de la Unidad de Cuidados Paliativos, ya que es un espacio de relajación, lo que propicia que las personas bajen sus niveles de estrés y ansiedad”, señaló Ivonne Sepúlveda Psicóloga, encargada del huerto Colibrí.
Lo que partió como un proyecto el año 2017, comenzó a tomar forma a través de un FNDR del 6% realizado por la Fundación Arteamaru, con el que se pudo hacer la recuperación del espacio y la construcción del huerto y desde este año han sido los mismos pacientes de la unidad, familiares y amigos quienes han formado un grupo de voluntarios que trabajan los días sábado para darle vida al Huerto Terapéutico Colibrí.
“Nos queda mucha tarea por delante, pero lo que me tiene más contenta es que hayan voluntarios, pacientes, familiares y amigos, de todas las edades y que todo esto se de en un hospital, al medio del centro urbano”, comentó Ana Miles, médico jefe de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Juan Noé.
Para llenar de buenos deseos y energías este nuevo espacio del Hospital Juan Noé se realizó una Phawa, en la que estuvieron presentes autoridades del Servicio de Salud, del Hospital, pacientes, familiares y amigos de la Unidad de Cuidados Paliativos.
“Encuentro que es una iniciativa muy potente, tanto por el lado urbano ver pequeños puntos verdes en la ciudad y por otro lado el fondo de esta iniciativa que es que la hacen los propios usuarios del hospital”, comentó el Seremi de Agricultura, Jorge Heiden, quien visitó el Huerto Colibrí.
Respecto a la plantación del huerto el concepto es acercar a la comunidad la herbolaria local, “nuestra visión es sobre nuestras plantas, nos gustaría conocer lo nuestro, vamos a tener un huerto para que la gente nos cuente que plantas usaban sus abuelos, la idea es crear plantas medicinales con una cultura atrás”, explicó la doctora Miles.
“Me encanta que el hospital tenga este huerto, me gustaría que la gente que se interese por esto pueda venir, es una terapia muy buena, y que se reinvente este espacio me parece excelente, trabajar en este huerto es algo que te da alegría y el alma se alegra y eso te sube el autoestima”, explicó Juana Crispin, paciente de la Unidad de Cuidado Paliativos y voluntaria del Huerto Colibrí.
El próximo paso es seguir adaptando el espacio y adecuándolo a las condiciones necesarias para contar con una Farmacia Viva, en donde se sumaría a este trabajo la orientación de una Qulliri, terapeuta Aymara, con el fin de potenciar el trabajo multicultural y comunitario que ya se está realizando.
