Médico Patricio Moyano: “Cumplí un ciclo. Di lo mejor que pude dar”

 

Después de 33 años en el Hospital Regional de Arica Dr. Juan Noé, el médico cirujano Patricio Moyano Pizarro dejó el hospital para dedicarse a proyectos personales. Su historia como médico en Arica, comenzó en 1985, cuando ingresó a este recinto hospitalario como médico cirujano en el servicio de cirugía. “Nunca quise trabajar en ciudades grandes”, dijo al recordar que llegó a Arica después de 6 años en Yungay – Octava Región – y 3 años de beca, en Santiago, en el Hospital Dr. Sótero del Río.

Poco a poco comenzó a ganarse un espacio en el hospital de Arica y en el año 1990 se hizo cargo de cirugía oncológica, durante 5 años, para luego asumir la jefatura de la unidad de urgencia, pero no por mucho tiempo, ya que rápidamente fue nombrado director, cargo que desempeñó hasta fines del año 1996.

En el año 1997, regresó a la unidad de urgencia, lugar en el que desarrolló labores hasta el año 2009, etapa que consideró de mucho crecimiento. “Un periodo estable, de desarrollo profesional, de cierto prestigio nacional. En ese momento los cirujanos nos capacitamos en atención hospitalaria, algunos nos convertimos en instructores del Programa Americano de Trata del Trauma y personalmente fue un periodo de desarrollo”, comentó.

Desde el año 2009, comenzó derechamente su andar por Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA). “Durante esta nueva etapa operamos a miles de pacientes: cirugías de hernias, vesículas y  pequeños tumores principalmente”, comentó; pero no es hasta el año 2016 que se reorganizó la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria y Moyano asumió la jefatura.

A su juicio, comenzó ahí una nueva etapa en Cirugía Mayor Ambulatoria en el Hospital, dada por la instalación del servicio en el área donde se encuentra hoy en día, la nueva organización con infraestructura y recursos propios. “En ese momento levantamos un servicio nuevo, de enorme valor operativo y con el esfuerzo de la gente principalmente”, relató el doctor que destacó a su equipo de trabajo como principal eje para el éxito de este servicio que pasó de operar tres pacientes a la semana a doce.

A días de dejar su trabajo en el hospital, Patricio Moyano dijo sentirse tranquilo y satisfecho. “Entregué lo mejor que sabía hacer y lo que no sabía, lo aprendí, lo estudié con el único interés de servir a los pacientes, espero nunca haber dañado a nadie y haber hecho las cosas bien”.

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